sábado, 19 de febrero de 2011

Citando a Zoltán Kodály II

  La conexión orgánica entre la música y el movimiento físico es expresada en los juegos cantados. Éstos, particularmente al aire libre, han sido uno de los principales divertimentos de la infancia desde tiempo inmemoriables.
  La preservación de estos juegos antiguos es de primordial interés cultural. [...] estos juegos tienen un valor puramente humano como: incrementar la atención y brindar muchísima alegría. No hay mejor medicación para prevenir prevenir precoces. Nuestros niños se consideran demasiado viejos para jugar cuando salen del jardín. No debemos dejar que eso pase. Debemos alentarlos a que no sientan vergüenza del entretenimiento. Cuanto más larga es la infancia, más armoniosa y alegre será la vida adulta.


Fragmento extraído de su libro Énekes játékok (Juegos cantados)

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